Neptuno

“El proyecto Neptuno era una falsa solución para el abastecimiento de agua del área metropolitana. Hoy (tenemos) la tranquilidad de que Neptuno no va más, que por fin se entendió que el Río de la Plata no es una fuente de agua segura, y mucho menos infinita”, dijo al programa Lado B de TV Ciudad la integrante de REDES – Amigos de la Tierra Uruguay, María Selva Ortiz.

“La otra gran noticia que tenemos” es que se direccione la mirada hacia el río Santa Lucía. “Según nos dice la academia, la cuenca del Santa Lucía da y sobra para abastecer de agua para consumo humano al área metropolitana”, agregó María Selva.

Así es. Neptuno no va más. El actual gobierno uruguayo escuchó a la población y decidió, a mediados de julio no continuar con ese proyecto, y emprendió negociaciones con el consorcio a cargo de la obra, Aguas de Montevideo, para construir una planta potabilizadora de agua sobre la cuenca del río Santa Lucía, cerca de Aguas Corrientes. La información se oficializó en una conferencia de prensa del gobierno el 18 de julio.

“El proyecto Neptuno fue vetado gracias a la lucha”, aseguró REDES-AT Uruguay en redes sociales enseguida que se supo la noticia. “Celebramos la caída del nefasto Proyecto Neptuno, fruto de años de lucha, organización social, de difundir argumentos académicos y presencia constante en el territorio”, añadió.

Para la organización ambientalista, el pueblo uruguayo se transforma nuevamente en ejemplo de lucha colectiva con fundamentos sólidos en la defensa del agua. En 2004 la ciudadanía marcó un hito inédito a nivel mundial, con una reforma constitucional que determinó que el agua es un derecho humano fundamental, y que los servicios de agua potable y saneamiento en el país solo pueden ser prestados por empresas públicas. “No admitimos a las empresas privadas en el proceso de abastecimiento de agua potable”, reafirmó ahora REDES-AT.

No obstante, ante el anuncio del gobierno nacional de negociar con el consorcio privado Aguas de Montevideo (Saceem, Berkes, Ciemsa y Fast) la construcción de una planta potabilizadora cerca de Aguas Corrientes, REDES-AT afirmó: “Seguimos alertas y organizadas/os para asegurar el cumplimiento del artículo 47 de la Constitución, y por un servicio de agua potable público, universal y de calidad para nuestro pueblo”.

REDES, como parte de la Comisión Nacional en Defensa del Agua y la Vida, junto a otras organizaciones, colectivos y movimientos sociales que defienden el derecho humano al agua, ha denunciado durante años que Neptuno violaba la Constitución, el Acuerdo de Escazú y otras normas internacionales, que no era una fuente de agua segura ni infinita, y que además hay alternativas mejores.

La lucha fue larga y tuvo varias estrategias: movilizaciones, campamentos, campañas, presencia en territorio, el apoyo de la comunidad científica y académica del país, el camino jurídico, el trabajo de denuncia en los medios, entre otras. Porque el agua es nuestra.

“Estamos muy contentos. Realmente tirar Neptuno, que se hayan escuchado todos los argumentos, la movilización social, a la academia, a la Universidad de la República, y que tengamos sentido común de entender que el Río de la Plata no es una fuente de agua para consumo humano, es una muy buena noticia. (…) Es un gran triunfo de la movilización popular y de la organización social”, dijo María Selva Ortiz a MVD Noticias.


A continuación, ponemos a disposición algunas entrevistas realizadas a nuestra compañera María Selva Ortiz luego de que se cancelara el proyecto Neptuno.